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Ubicada en la costa este del sur de África, Namibia redefine la palabra “escape” con sus interminables paisajes sacados de otro mundo. El desierto más antiguo y las dunas más altas del mundo, el cañón más profundo del continente africano y una increíblemente abundante vida salvaje serían, cada una, razón suficiente para visitar. Sin embargo, estas son tan solo algunas de las maravillas naturales que le esperan en este vasto lugar.
Los destinos más populares son, indudablemente, Sossuvlei y el desierto Namib, donde colosales dunas rojas adornadas con el icónico orice convergen con las aguas del Atlántico. Cerca, la Costa de los Esqueletos es frecuentada por adictos a la adrenalina y alberga inquietantes naufragios, antiquísimo arte rupestre y resilientes especies adaptadas al desierto. En el norte, el emblemático Parque Nacional Etosha, las reservas a su alrededor y la región de Waterberg son, por su esplendor, paradas obligatorias de safari. En el extremo opuesto, el cañón del río Fish delinea una de las más retadoras e inolvidables rutas de senderismo a lo largo de su base.
Con todos estos milagros de la naturaleza esparcidos por sus confines, un viaje por carretera es una gran manera de explorar este grandioso país. No obstante, deberá tomarse su tiempo para explorar todo lo que Namibia tiene para ofrecer.